“Periódico de poesía, teoría, crítica y artes visuales. Publicación trimestral N°1, diciembre de 1986”. Este es exactamente el texto que se ubica debajo del nombre que personificaba este proyecto editorial Al Margen y que, por supuesto, proyectaba su quehacer y contenidos.
Creado y dirigido por la poeta Carmen Berenguer y la colaboración del poeta Jaime Lizama y el artista visual Manuel Pertier, financiado por ellos mismos, se lanzó a las calles en busca de lectores que no escaseaban.
Al Margen apareció sólo dos veces. Sin embargo, tuvo un potente impacto en el medio literario, con una edición de mil ejemplares el primer número y dos mil, el segundo. Logró generar, con ese tiraje, su llegada a amplios sectores de lectores.
Al Margen tuvo su lanzamiento oficial en el Instituto Chileno-Canadiense, en el emergente Barrio Bellavista en el marco de una actividad contracultural. Así nos relató Carmen Berenguer este acontecimiento:
“Nos presentamos junto a la revista Pájaro de Cuentas que la dirigía Patricio Rueda. Fue una gran performance, yo encerré una gallina en un baño y andaba con la gallina de aquí para allá, qué significaba todo eso, creo que todo funcionaba en torno a la libertad. ¿Y qué tenía que hacer la gallina allí? Pienso que pudo ser su derecho a cacarear como loca y poner un huevo, tal vez el huevo era el diario”.
Respecto a los intereses del equipo y al contexto que los envolvía, Carmen Berenguer, agregó:
“Publicamos a gente joven y a Dianne Di Prima, poeta Beat de la Contracultura norteamericana. Estábamos más permeables a lo que excedía lo literario. Pertier era obsesivo con el arte conceptual desde la plástica, y nos interpelaba profundamente, lo que estaba ocurriendo en el arte, en la visualidad y que, debido al encierro chileno lo que ocurría aquí, era de mucho interés. A mí me gustaba el cómic, el rock, piensen que yo venía llegando de U.S.A. y me había tocado vivir de cerca la trágica historia de Vietnam, el Water Gate, Nixon, Carter y Reagan con Friedman, el golpe de estado en Chile y todo lo que significa el derrumbe y lo trágico de sobrevivir a ello.
Con el que realmente dialogaba era con Jaime Lizama, parte fundamental del diario, pues Jaime Lizama venía de la escuela de filosofía y de ser parte del grupo Polifemo, especialistas en poetas como Dylan Thomas entre otros. Ellos hacían una teatralización performática de la voz, la poesía y la muerte de Chile”.
En ese mítico primer número de Al Margen destacó la publicación de 5 Cartas Revolucionarias de la poeta beat Dianne Di Prima. Conozcamos dos de esos textos seleccionados por el periódico:
CARTA REVOLUCIONARIA N°17
TODOS SENTIREMOS
EL DOLOR
NO HABRÁ
UN CADILLC Y UNA
CASA DE 40.000 DÓLARES
PARA CADA UNO
SIMPLEMENTE
EL PLANETA NO LO
SOPORTARÁ
LO QUE HABRÁ ES
SUFICIENTE
COMIDA, SUFICIENTES
NECESIDADES, LOS
LUJOS
SE TENDRÁN QUE IR POR
LA BORDA.
HASTA EL MÁS POBRE
TENDRÁ QUE DAR ALGO
PARA SER LIBRE.
CARTA REVOLUCIONARIA N°21
PUEDES ACASO
¿SER DUEÑO DE LA TIERRA,
DUEÑO DE LOS
DERECHOS
DEL TRABAJO DE LOS
OTROS (ACCIONES,
FÁBRICAS
O DINERO PRESTADO CON
INTERESES)
Y QUÉ ME DICES
DEL RENDIMIENTO DE
LAS MISMAS COSECHAS,
LOS AUTOS,
DE LOS AVIONES
TIRANDO BOMBAS
PUEDES ACASO
SER DUEÑO DE BIENES
RAÍCES, PARA QUE
OTROS
TE PAGUEN RENTA? ¿A
QUIÉN
PERTENECE EL AGUA, A
QUIÉN PERTENECE EL
AIRE A MEDIDA QUE SE
ENRARECE?
LOS INDIOS AMERICANOS
DICEN QUE UN HOMBRE
SÓLO PUEDE SER DUEÑO
DE AQUELLO QUE ES
CAPAZ
DE CARGAR EN SU
CABALLO.
Sigamos conociendo qué nos traía Al Margen en esta primera edición. Lo primero que surge en sus páginas interiores son 5 poemas de Humberto Quino, poeta boliviano, conozcamos uno de ellos:
Para que el pan
Sea un bocado común
Para que la blasfemia
Vaya en carroza
En fin
Para suprimir los
Golpes de Estado
Hay que suprimir el
Estado.
El periódico literario Al Margen desplegó sus alas en un álgido momento político del país, época también del shock económico de la teoría de Friedman. A consecuencia de lo mismo, se vivía un proceso conocido como el “apagón cultural”. Refiriéndose a esto, la poeta Carmen Berenguer, señala:
Justamente el mundo chileno fuera de nosotros, se iba transformando en lo que Chile es ahora. Esto comenzó inmediatamente después del golpe militar y en los 80 se consolidaba el modelo de los estudiosos de Freiedman. Nosotros hacíamos una verdadera resistencia cultural, lecturas, teatros, rock, cómic, y de hecho los “80” son importantes por eso. Toda la actividad de la SECH continuaba en el bar “El Castillo Francés”, bien eso quedó atrás y puedo escribirlo”.
Al Margen una publicación intensa en el posicionamiento cultural y al mismo tiempo muy vital, sin duda un aporte para aquellos días grises.