Sucedió en 1962, en Rastov, Unión Soviética. Rashid Nezhmetdinov jugaba con blancas y el juego con su oponente, Oleg Chernikov, estaba estancado en la jugada número 11, todo indicaba que el empate o “tablas” era inminente. Sin embargo, Nezhmetdinov dejaba correr su reloj y llevaba 40 minutos pensando en el más estricto silencio. Chernikov, inquieto, se había levantado y comentaba con otro jugador sobre la irritante demora de su rival, cuando un niño se le acercó corriendo, indicándole que Nezhmetdinov acababa de sacrificar su dama. Chernikov regresó a su asiento, y atónito verificó que Rashid Nezhmetdinov ofrecía su dama a cambio tan solo de un par de piezas menores. Tomó la ofrenda, pero jugada a jugada las Blancas se tornaron más amenazantes. El juego fue para Nezhmetdinov, en uno de los sacrificios de dama más espectaculares de la historia del ajedrez mundial.
En el tablero chileno, el de la escena política. Yasna Proboste también pareció detenerse a pensar, es más todo su sector pareció sumido en una profunda reflexión, sólo que el tiempo no se detuvo y el resto de los jugadores siguieron moviendo sus piezas y tomando posiciones. Así acontecieron primarias legales, con franja electoral y debates incluidos. De hecho, hubo sorpresas nada agradables para los planes de Yasna, cuyo mejor escenario era un clivaje izquierda-derecha, entre Jadue y Lavín. Hoy el tablero ha sido ocupado, de acuerdo al imaginario, por la centro izquierda que representa Boric, y la centro derecha de Sichel, dando poco espacio para que una tercera pieza pueda moverse. El juego parece estancado para Provoste, ya que la votación de Boric y del pacto Apruebo Dignidad en general, fue demasiado contundente, lo que hace ver prácticamente imposible que pueda desplazar al candidato del Frente Amplio en primera vuelta. Así las cosas, quedan dos escenarios posibles, y en ambos se requiere “sacrificio de dama”.
Dando por descontado que Yasna Provoste vencerá sin dificultad a contendores tan febles como son Paula Narváez y Carlos Maldonado, el primer escenario posible es que en la elección presidencial no pase a segunda vuelta, por lo que la decisión de presentarse pasaría por endosar los votos, es decir mostrar cuantitativamente que quien quiera gobernar necesita de su apoyo, y eso siempre tiene su precio. El segundo escenario, aparentemente más alentador para Yasna, es pasar a segunda vuelta desplazando a Sichel, que después de todo salió tercero en la votación general de la primaria legal. Esta posición podría ser ganadora, ya que reiteraría la elección de gobernadores por la región metropolitana. Sin embargo, llegar a la presidencia con los votos de la derecha y la elite económica es un precio demasiado alto para una referente del progresismo de la antigua concertación, a quien no le sería fácil gobernar una vez que las transformaciones sociales que el país demanda no avancen con la velocidad esperada. Por tanto, incluso si ganara la presidencia en esas circunstancias sería para Yasna un “sacrificio de dama” para su carrera política.
Demás está decir, que detrás de Yasna se encuentra un jugador nervioso a quien le han cambiado el tablero, parece atacar, pero sólo sabe defenderse, no es precisamente Nezhmetdinov que gustaba de posiciones ofensivas, que podía sacrificar su reina tan sólo por ganar un centímetro más en el tablero. La agresividad de la jugada de Yasna, obedece más a las circunstancias, pues los partidos de la ex concertación se juegan simplemente el derecho a seguir jugando. El sacrificio de dama no es una jugada para la consagración, el único trofeo que hay al final de la partida, es la sobrevivencia.
