ENTREVISTA: TERESA CALDERÓN. FONDOS DE CREACIÓN 2023.

 

En medio de la polémica generada por los resultados de las becas de creación del fondo del libro correspondientes al 2023, recién publicadas, Teresa Calderón arremete, desde su posición de jurado, aseverando que no está de acuerdo con los criterios de discriminación positiva entre pueblos originarios, género y región, pues distorsionan el resultado, en el que debiera primar la calidad literaria. A través de sus RRSS invita a los/as participantes a reclamar formal y públicamente sus evaluaciones y rechazos. 

 

Teresa, en el contexto de los resultados de las becas de creación del fondo del libro 2023, en redes sociales, han aparecido muchas reacciones adversas de las personas cuyos proyectos han sido rechazados. Indican falta de seriedad, falta de coherencia, entre otras opiniones, lo que no es de extrañar en este tipo de procesos. Sin embargo, tú que fuiste parte del equipo evaluador este año, has vertido críticas en la misma línea, arriesgando no volver a ser jurado en este tipo de fondos ¿Qué te motivó a dar tu opinión públicamente?

Llevo muchos años siendo evaluadora de proyectos y cada año hay nuevas modificaciones y menos recursos para asignar a los postulantes. El proceso es muy claro y transparente; excelente el trabajo que realizan los funcionarios encargados de la misión becas de creación. Yo siempre digo lo que me parece cómo se dan las cosas. En la última versión cuando fue el momento de evaluar el proceso, yo indiqué, por primera vez por escrito, que no me parecía que la discriminación positiva fuera una opción porque era de suyo injusta.

 

Respecto a las críticas que se esgrimen, algunas personas denuncian que es imposible hacer una evaluación justa, si el equipo evaluador habría tenido solo tres semanas para leer los trabajos, ¿crees que los tiempos no fueron los adecuados?

La verdad es que tenemos bastante tiempo para evaluar, y si cada evaluador se programa bien puede hacer su trabajo sin prisa y con mucha seriedad. El problema no está en los evaluadores ni en los tiempos, porque veo trabajar a todos y cada uno con mucha seriedad y compromiso.

 

Por otro lado, se ha planteado que la discriminación positiva para mujeres y concursantes de provincia ha dejado sin seleccionar a proyectos de mayor calidad ¿Crees que es así? ¿Ese criterio se encuentra en las bases que se les entregan a los postulantes? ¿te viste obligada a usar ese criterio? ¿Cómo es el criterio al interior del concurso para estos asuntos?

Este es el quid del asunto. Antes, se seleccionaban más proyectos con los fondos y nada hay que decir sobre la calidad de los concursantes ganadores. El grave problema es que de pronto al Consejo o no sé a quién, les vino una obsesión por la “paridad”, los concursantes de regiones y pueblos originarios. Las comisiones evaluamos de acuerdo al valor literario de la muestra que envía el postulante. Y no es ahí donde está el problema. Sí nos advierten que no todos los proyectos con puntajes altísimos serán ganadores porque en otra instancia (un misterio para mí, porque no sé qué instancia es, ni quiénes son sus integrantes) habrá de determinar según los porcentajes establecidos que se destinarán a mujeres, regiones, etc.

 

El problema que tenemos es que toda discriminación, aunque se disfrace de positiva es “discriminación” de todas maneras. En un concurso literario y en una postulación a becas DEBEN ganar los mejores según su trabajo sin consideraciones extra literarias.

 

Por otra parte, nada que hacer si consideramos que en Santiago “La población regional es de 6.061.185 habitantes, equivalente al 40.1% de la población nacional y su densidad alcanza a 393 hab/km2. El crecimiento de la población en el período intercensal fue de 15,3%. La población rural es de 186.172 personas, representando el 3,1% de la población total regional”.

 

Cada región cuenta aparte con recursos propios, además de los que se le asignan desde Santiago. Además, si nos ponemos a preguntarles a los poetas que viven en Santiago cuál es su ciudad natal, la mayoría somos de provincia: nacidos y criados. Es rara la cosa, ¿no?

 

Además, estas prácticas de discriminar positivamente me ofenden como mujer porque siento que el machista padre Estado debe preocuparse de las pobrecitas mujeres, para que no se aprovechen de su “inocencia e invisibilidad aparente”. Las mujeres nos defendemos solas y no necesitamos padres ni maridos que hablen por nosotras. En las catacumbas hemos aprendido a luchar por nosotras y nuestros derechos. Arriba mujeres del mundo… repito fiel al poema que escribí en 1983-

 

Has llamado a que los concursantes denuncien públicamente ¿En qué casos deberían hacerlo y porqué vía?

Hay una instancia oficial que está en las bases y que es de apelación a los resultados. Y funciona.

Pero mi llamado es a denunciar en las redes sociales a quienes se sientan defraudados por este concurso. 

 

¿Qué o cuáles son los mecanismos que se debieran usar para apoyar la creación literaria sin que quede esta sensación de insatisfacción o injusticia en el aire?

La única solución, desde mi punto de vista, es la destinación del máximo de recursos para que todos los mejores; todos los proyectos de excelencia puedan obtener la beca. Solo los mejores sin consideraciones ajenas a lo propiamente literario. Alguien ha escuchado hablar de pintura de mujeres, de hombres, de provincia, de pueblos originarios para opinar, evaluar o premiar su calidad que nace desde las propias leyes internas de ese propio arte: música, ballet, escultura, incluso entre las artes del lenguaje, yo jamás he oído mencionar siquiera ese discurso que se aplica a poesía y narrativa.

 

¿Sientes que haber hecho pública tu postura en este caso, afecte tu relación como jurado en los fondos, es decir que no seas convocada para evaluaciones posteriores?

La verdad es que eso nunca me ha preocupado porque por mi personalidad y carácter, yo he abandonado lugares de trabajo a la primera actitud o trato que me cause conflicto con lo que no me parece correcto o de acuerdo a mis creencias. Entonces, si no vuelvo a ser convocada, no me afectaría en lo personal, solo me afectaría no tener la posibilidad de leer trabajos donde el genio fluye y argumentar a su favor. Pero por mí, no, cero.

 

¿Qué le recomiendas a aquellas personas que desconfían de su evaluación y a quienes han decidido no volver a postular a este tipo de instancias, que por lo demás es la única?

 Les pido que sigan postulando y haciendo públicas sus quejas, su gratitud y su alegría si ganan, o su tristeza, sin soberbia y sin insultos ni malas palabras. Pero que se haga público algo tan importante como es para un escritor o poeta, poder acceder a esos fondos para trabajar en sus proyectos sin tener que trabajar en mil cosas para ganarse la vida. Los latinos hablaban del ocio creativo (que permitía pensar, leer, escuchar música, conversar, vivir, crear) contra el neg-ocio, es decir la negación absoluta de lo anterior y el significado actual de la palabra negocio.

 

 

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